El desarrollo psicosocial es un proceso de cambio ordenado y por etapas, en que se logran, en interacción con el medio, niveles cada vez más complejos de movimientos y acciones, de pensamiento, de lenguaje, de emociones y sentimientos, y de relaciones con los demás.

2 AÑOS
El niño de 2 años empieza a mostrar preferencias por los compañeros de juego. El niño juega más con los niños con los que está más familiarizado y la conducta amistosa reemplaza poco a poco a la negativa. A los 2 años es común que los niños persigan, peguen y empujen no con el afán de lastimar sino de proteger su juguete de otro niño.
Los niños necesitarán supervisión y experiencia para tomar en consideración los intereses de los demás.
3 AÑOS
Tienen menos actividades solitarias y los contactos amistosos y la conducta cooperativa van incrementando. Los niños en esta edad pueden elegir uno o dos amigos, con quienes se identifique por cortos períodos de tiempo. También disminuye la conducta agresiva gradualmente pero deben ser supervisados y reforzados en los actos socialmente aceptables.
4 Y 5 AÑOS
Las interacciones sociales de estos niños ya son más complejas, ya que empiezan a depender menos de los padres y cada vez más de los compañeros para obtener compañía e interacción social. Los niños se vuelven menos competitivos.
El nivel social y la interacción con los compañeros dependen en parte de las habilidades de comunicación de los niños, pues descubren nuevas situaciones con sus familiares y amigos.
6 AÑOS
Estos niños ya tienen conductas psicosociales más desarrolladas, ya que tienen un núcleo más amplio en el cual se desenvuelven. Pero aún no pueden hacer una distinción clara entre su propia interpretación de una situación social y el punto de vista de los demás.